Un dispositivo que a falta de saber el precio –y de saber si realmente los rumores son ciertos– pinta bastante bien.
Las especificaciones son las siguientes, pantalla de 5,2 pulgadas Amoled QHD, cámara trasera de 16 megapíxeles, procesador Snapdragon 808, 4 GB de RAM, 32/64 GB de almacenamiento y 3280 mAh de batería. Características muy atractivas que se completan con lo nuevo que se rumorea, ya que según algunos medios como HDBlog, han podido saber a través de un ingeniero de Verizon –que casualmente ha borrado sus mensajes en Google+–, que este nuevo Moto X vendría con un flash frontal para selfies –cámara delantera de 5 megapíxeles– y lo mejor de todo, ranura para microSD.
Si bien el flash para selfies puede ser interesante para aquellos fanáticos de esta moda, la ranura para tarjetas microSD es una gran noticia. Con cada vez más firmas apostando por teléfonos sin microSD –Xiaomi está en contra de esta característica– sería interesante que Motorola arriesgara por ella, hecho que alegraría a muchísimos usuarios. También sería una buena manera de corregir lo sucedido en el Motorola Moto X 2014, cuyo almacenamiento se quedaba realmente escaso debido a la imposibilidad de ampliarlo.
Deseamos ver este interesante teléfono durante el mes de septiembre de este año para comprobar con qué nos sorprende la firma americana. Buenas especificaciones y un software que siempre nos ha gustado debido a su gran rendimiento, esperemos que el precio no sea excesivo.
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